lunes, 3 de noviembre de 2014

#89. Chips neurosinápticos. Artículo de Tom Simonite

Tom Simonite (2014). IBM chip processes data similar to the way your brain does. MIT Technology Review, 7 de agosto de 2014.


En resumen, el nuevo chip Synapse de IBM lleva 5400 millones de transistores organizados en un millón de "neuronas" interconectadas por 256 millones de "sinapsis". A lo mejor todo el mundo ya lo sabía, pero yo no me había enterado.

El dinero lo ha puesto la cosa militar, claro. Aquí podemos comprobar que en los dos primeros años del proyecto (2009-11), DARPA puso unos 77 millones de dólares encima de la mesa. También vemos que el objetivo era tener en 2012-13 un chip con un millón de neuronas y 10 000 millones de sinapsis. (Vamos con "un poco" de retraso sobre el horario previsto.)

La nota de prensa de DARPA es esta.
Each chip consumes less than 100 milliWatts of electrical power during operation. When applied to benchmark tasks of pattern recognition, the new chip achieved two orders of magnitude in energy savings compared to state-of-the-art traditional computing systems. (...) could give unmanned aircraft or robotic ground systems with limited power budgets a more refined perception of the environment, distinguishing threats more accurately and reducing the burden on system operators.
Regocijémonos, ya llegan los Terminators... :(


Hace unos días ha aparecido también un ensayo inédito de Asimov de 1959, escrito en un contexto parecido.


Isaac Asimov (2014). On creativity. MIT Technology Review, 20 de octubre de 2014.

lunes, 20 de octubre de 2014

#87. Discurso de graduación de Ursula Le Guin

Curiosamente, una commencement address no es un lección inaugural (!) sino el discurso ese que dan en las películas a los jóvenes cuando se gradúan.

En 1986, Dª.Ursula pronunció el del Bryn Mawr College (Pensilvania), que es un college femenino. ¿Existen instituciones académicas donde se discrimina al 49% de la población? Parece que sí; aunque como tampoco me cogerían en Harvard si pidiera plaza, no se puede decir que me preocupe excesivamente.


Ursula K. Le Guin (1986). Bryn Mawr commencement address. En: Ursula K. Le Guin (1989). Dancing at the edge of the world: thoughts on words, women, places, 147-160. Harper & Row, Nueva York.


A pesar de mi respeto por la inteligencia de Dª.Ursula, sin duda mayor que la mía, a veces me pregunto si no sería mejor "levantarse en armas contra el océano del mal" y decir claramente que la CF feminista, vista desde hoy, parece embarazosamente fallida en lo intelectual, autocomplaciente y consolatoria.

Esta semana leía una tesis de maestría holandesa (toma pegote) y me sorprendía lo mal que suena el proyecto de La mano izquierda cuando lo ves puesto en palabras. No sabes si es Ursula Le Guin o Bibiana Aído.


Bob Boogaerdt (2013). "Don't panic". An exploration of the literary value of science fiction. Tesis de maestría, Universidad de Utrecht.


Esta es una tesis que encaja perfectamente en lo alguien desde el fándom español podría hacer. De hecho, imagino que si a Boogaerdt le pusieran delante la idea de "literatura prospectiva" diría: ¡esto es justo lo que yo he querido decir durante toda la tesis!

With this thesis, my aim was to take away some of the prejudices that exist towards SF by
showing that this genre can produce works with literary qualities. By exploring the origins of
SF and its early history, I have tried to show that the genre has always known a tension
between low and high quality SF. 

Solo en el dentro somos tan papistas que tenemos defender la mala CF por el hecho de ser CF, explicándola como un elemento "en tensión" con la buena CF, en lugar de hacer simplemente como si el olvido se la hubiera tragado en el momento de su publicación...

lunes, 13 de octubre de 2014

#86. 2001 y Dark City. Reseñas de Roger Ebert

Una reseña interesante, especialmente cuando recuerda la reacción del público en el estreno. Algunos de los comentarios son muy interesantes, también.


Roger Ebert (1997). 2001: A space odyssey. RogerEbert.com, 27 de marzo de 1997.


[Por cierto, que yo una vez empecé en mi blog personal a hacer una macrorreseña por fascículos de 2001. Tenía que ser absolutamente insensata, increíblemente pedante, y rigurosamente fiel al contenido de la película. Defendía (o iba a defender) la tesis de que 2001 era un obra de crítica social, estilo Ken Loach. Al final no la terminé, pero tuve grandes logros como meter cinco o seis palabros griegos en una sola frase, o justificar que el famoso corte del fémur a la estación espacial no es un salto al futuro sino un flashback.]

Otra reseña, que hace parecer Dark City algo que vale la pena ver:


Roger Ebert (2005). Dark City. RogerEbert.com, 6 de noviembre de 2005.

lunes, 6 de octubre de 2014

#85. Hiperagencia. Artículo de John Danaher

¿Y tú me lo preguntas? Hiperagencia eres tú.

Danaher define la hiperagencia como "un estado de cosas en que virtualmente todo aspecto constitutivo de la agencia (creencias, deseos, estados de ánimo, disposiciones, etc.) está sujeto a nuestro control y manipulación". Ese estado aún no existe, evidentemente, y resulta que existe actualmente un debate en la literatura filosófica sobre los problemas morales del progreso tecnológico que podría llevarnos a ese punto.

Me ha sorprendido que el arsenal de ejemplos que se manejan parezca sacado directamente de la ciencia-ficción. Especialmente, consideremos la siguiente situación:

The objection can be illustrated by way of a thought experiment from David Owens ... imagine the “Pharmacy of the Future”, in which drugs are available to manipulate every mood, belief or state of mind. Suppose you enter the pharmacy because you have an irrational belief that your romantic partner is cheating on you. The pharmacist has a drug that will solve your problem: Credon. This will strengthen your belief in your partner’s fidelity, allowing you to continue the relationship without the mental anguish. Problem solved, right? Not necessarily. Before you decide to take Credon, the pharmacist, in an effort to give you all the relevant options, highlights another drug, Libermine, that could do the trick. The difference is that Libermine does not alter your belief in your partner’s loyalty, it alters your attitude toward romantic fidelity. With Libermine the possibility of your partner’s cheating won’t cause any mental anguish. Maybe you should go for that?

Es fácil reconocer en la libermina el motivo central del relato Axiomático, de Greg Egan. (Se nota que Egan es escritor en que el cambio de actitud hacia el valor de la vida humana es más potente desde el punto de vista dramático.)

En su artículo, Danaher, quien por cierto tiene un blog muy recomendable, responde a los argumentos según los cuales ese progreso debería ser evitado, concluyendo que son "débiles o vencibles".

El problema de la filosofía es que no tiene asa por donde cogerla, y, tras hacer el esfuerzo de mostrar que un argumento es débil, a uno le puede pasar que su "oponente" diga que le da igual porque no presentaba su argumento como argumento de eso sino de otra cosa, por ejemplo de que es necesario un análisis ético detallado de la situación. Eso es lo que hace Saskia Nagel en su "follow-up", que es muy interesante en que maneja ejemplos reales y por tanto sirve para hacer minería de ideas.


John Danaher (2014). Hyperagency and the good life. Does extreme enhancement threaten meaning? Neuroethics 7, 227-242.


Saskia Nagel (2014). Enhancement for well-being is still ethically challenging. Frontiers in Systems Neuroscience 8, artículo 72, 1-4.


El artículo de Owens donde presenta el argumento "a la Axiomático" es

David Owens (2007). Disenchantment. En: Louise M. Antony, coord. (2007) Philosophers without gods. Oxford University Press, Oxford.


No hace falta hacerse una cuenta para leer el artículo, solo para descargarlo.

En la introducción al libro, Antony califica a la "farmacia del futuro" de Owens como "a brilliantly creepy thought-experiment". Bueno, ya estaba en Egan en 1990 (y, en su libro, Karen Burnham muestra convincentemente que la mayoría de las ideas de tecnología posthumana que aparecen dramatizadas en sus relatos de esa época están sacadas de otros pocos sitios).

jueves, 20 de febrero de 2014

#83. Ancillary justice. Reseñas de Nina Allan y Russell Letson

¿Qué diferencia hay entre la obstinación y la determinación? Ninguna. Pero ser un terco y un obstinado es malo, mientras que estar lleno de determinación es muy positivo.


Nina Allan (2014). We’re reading ANCILLARY JUSTICE by Ann Leckie. Arc Blog, enero de 2014.

I think that if I’d had this book in my hands when I was eighteen, I’d have loved it unequivocally. But therein lies the problem. (...) I can’t help asking myself if Ancillary Justice is really all that different from the science fiction we were reading thirty years ago.


Russell Letson (2013). Russell Letson reviews Ann Leckie. Locus Online, 27 de octubre de 2013.

Another side of the novel’s ambition is the way it is deeply engaged with the tropes and issues of the science fiction of the last forty years or so. As I read, I made a mental list of writers I was reminded of.


Y ahora un mensaje al vacío: Someone tell magazines to title reviews more intelligently!!!

jueves, 13 de febrero de 2014

#82. La singularidad tecnológica. Artículo de David Chalmers

Lo que más me llama la atención de la singularidad es cómo todos los precursores y los primeros que discutieron la idea son matemáticos: John von Neumann y Stanislaw Ulam, Irving Good, Ray Solomonoff... y hasta el propio Vernor Vinge, claro. Kurzweil es el que se sale un poco del patrón, pero supongo que por diseñar el sintetizador que lleva su nombre se le puede perdonar.

Muy recientemente, la discusión sobre la singularidad entró en la literatura filosófica con el siguiente artículo de David Chalmers:


David J. Chalmers (2010). The singularity: a philosophical analysis. Journal of Conciousness Studies 17 (9-10), 7-65.


(Ojo: la referencia dada por el propio Chalmers en el PDF -y que se ha extendido por el Internet de lo gratis- es incorrecta, ya que la revista, improbablemente, no numera sus páginas siguiendo el estándar, por lo que cada número del volumen 17 contiene una página 7. ¿Cómo se aclaran? No lo sé.)

El artículo de Chalmers, quien, aparentemente, es bastante conocido en filosofía de la mente y de la consciencia, tuvo muchas respuestas. Hice el esfuerzo de conseguir las que estaban disponibles y filtrarlas, y luego perdí la información. Qué se puede decir, soy un desastre.

Lo importante es no leer la de Damien Broderick, que, como autor y estudioso de la CF, sería la primera a la que nos iríamos.


Un resumen del artículo aquí, y un podcast en el que hablan con Chalmers del tema aquí.


jueves, 6 de febrero de 2014

#81. X-Men. Artículo de Neil Shyminsky

En este artículo se critica la "verdad revelada al fándom" de que los tebeos de mutantes tratan sobre la discriminación de las minorías, etc.

Como tal crítica, está bien, aunque el artículo es bastante criticable a su vez. Como creo que todo el mundo sabe, una parte preocupantemente amplia de la producción académica de EE.UU. sobre la cultura en las últimas décadas consiste esencialmente en suponer que hay un único discurso ideológicamente legítimo y coger la regla para medir la conformidad con ese discurso de una obra cualquiera, azotando al pobre autor ante la constatación de que su obra es otra cosa que mera propaganda política de ese discurso "legítimo". Es decir, que el estudio de la cultura es simplemente "la política por otros medios", de forma que uno puede llevar una plácida vida de profesor enseñando a los hijos de los ricos, escribiendo panfletos que nadie lee, y nunca ayudando a nadie, y aun así imaginarse por la noche en su casa que es un luchador por la libertad y hace una labor fundamental para cambiar el mundo.

Que no lo digo específicamente por Shyminsky, que parece un tío muy majo; pero no es que se sustraiga a esa tendencia.


Neil Shyminsky (2006). Mutant readers, reading mutants: appropriation, assimilation, and the X-Men. International Journal of Comic Art 8, 387-405.


Un comentario interesante al artículo es el siguiente.


Paul Matsushima (2012). Uncovering the racial themes of the X-Men: 1st glance, racial justice; double-take, white privilege. Eesahmu, 11 de marzo de 2012.

jueves, 9 de enero de 2014

#79. Microgéneros. Artículo de Alexis Madrigal

Ya he subido algunos artículos como este, el último aquel sobre Instagram. No querría hacerme pesado: estoy seguro de que todo el mundo lo entendió a la primera.


Alexis C. Madrigal (2014). How Netflix reverse engineered Hollywood. The Atlantic, 2 de enero de 2014.


Resulta que Netflix, la plataforma de streaming de películas que no viene a España porque presuntamente no le sale a cuento el oneroso sistema de derechos de autor que le pretenden imponer (o eso dice una leyenda urbana, vamos), ha desarrollado una clasificación de las películas en lo que llaman altgéneros pero podemos llamar descriptivamente microgéneros. ¿Cómo de micro son esos géneros? Mucho: Madrigal se ha molestado en averiguarlos todos y, p.ej., las películas sobre el matrimonio se dividen en unos 600 microgéneros. Hay unos 2500 microgéneros de películas violentas, y 16 microgéneros de películas de Jackie Chan, lo que en sí mismo es ultrasorprendente.

El que quiera saber el número exacto de géneros que manejan deberá pinchar en el enlace ;)

¿De qué sirve esto? Oficialmente forma parte del sistema de recomendación automatizado de Netflix, aunque estaremos de acuerdo en que el potencial de esta información para la producción de nuevas películas es interesantísimo. Basta con buscar los microgéneros: (a) que sean muy populares por el número de peticiones de streaming, (b) que contengan pocas películas. Taquillazo casi garantizado.

Microgéneros verdaderos son, p.ej. "películas de culto de miedo de científicos locos de los 70", "películas de viajes en el tiempo protagonizadas por William Hartnell", "dramas nostálgicos extranjeros impactantes visualmente", "documentales emotivos de lucha contra el sistema" o "series de televisión románticas en español que te hacen sentirte bien". Las películas dirigidas por Otto Preminger forman un género en sí mismas.

Estos géneros han sido creados a partir de un etiquetado exhaustivo de una gigantesca base de datos de películas, que se ha partido en géneros algorítmicamente. Las descripciones de los géneros son en sí mismas agregaciones de rasgos, p.ej. el que una película "te hace sentirte bien" se basa en valorar si tiene final feliz, el grado de violencia, si trata sobre la amistad u otras muchas características.

No creo que el algoritmo sea precisamente state of the art, aunque podría llevarme una sorpresa. Lo que sí hay que reconocer es que, a quien le guste un drama nostálgico impactante visualmente, probablemente le gustará otro. Por supuesto, "gustar" en un sentido ajeno a la calidad de las películas, que es lo que no entra en el algoritmo: en el mismo sentido en que, si te gustó X-Men y Iron Man, pues échale un ojo a Los Vengadores.

Hay varias cosas, por no alargarme, que señalar.

Una es: ¿por qué estas ideas no salen de las disciplinas académicas dedicadas a estudiar el cine y la literatura? Alguno dirá: por suerte; pero aquí queda la pregunta.

Otra es que no hay que perderse el generador automático de microgéneros que encabeza el artículo. En modo Netflix, bueno, es curioso. En modo Hollywood, pse. Pero en modo Gonzo es una auténtica mina. Ya nunca tendrás que pensar argumentos para tus relatos, y todos tus amigos admirarán tus idas de olla. He aquí la prueba:

-Road trips de época de madre e hija ambientados en la época prehistórica con una protagonista fuerte (prácticamente te da la novela hecha; lo único que no te dice es que van buscando la tierra de los espíritus de los antepasados y que un conjunto de cromañones van a intentar violar a la hija, pero eso ya lo sabemos todos).

-Musicales de amor prohibido sangrientos basados en un libro sobre el matrimonio.

-Películas de fantasía de un vengador espacial sobre la paternidad ambientadas en la antigüedad.

-Historias lacrimógenas de confusión de identidad de un monstruo sueco sobre la fama ambientadas en tiempos bíblicos (no sería fácil pensar esta ni después de beberse dos frascos de jarabe con dextrometorfano).

-Slashers peplum para románticos empedernidos basados en literatura contemporánea ambientada en Latinoamérica sobre amantes que se reencuentran (otra novela hecha).

-Dramas experimentales de búsqueda del tesoro y confusión de identidad basados en literatura contemporánea para edades de 0 a 2.

-Musicales de samuráis y ninjas ambientados en la era victoriana.


Quién no querría participar en una antología de historias basadas en premisas como estas. ¿Por qué no la organizamos?

lunes, 6 de enero de 2014

#78. Regalo de Reyes

Pues sí, amigo mío, los Reyes te han traído una tesis doctoral de casi 800 páginas. ¡Qué mala gente!


Sara Martín Alegre (1996). More human than human: aspects of monstrosity in the films and novels in English of the 1980s and 1990s. Tesis doctoral, Universidad Autónoma de Barcelona.


El tema es la monstruosidad; dado que Martín no adopta una definición precisamente restrictiva del término (monstruo es todo lo que se sale de lo "normal"), en el saco entra desde Alien hasta American psycho, desde Abyss hasta La bella y la bestia, y desde La lista de Schindler hasta Soldado universal.

Las referencias a la ciencia-ficción son muy abundantes, desde el propio título; pero están, en buena parte, diseminadas por todo el texto. Solo el capítulo VI está principalmente centrado en obras de CF, ya que metodológicamente no se hacen distinciones por géneros (subjetivamente ese capítulo me ha parecido más flojo que otros, por desgracia).

No sé la relación entre el libro de 2002 de la autora, Monstruos al final del milenio, y la tesis. Supongo que el 90% del libro puede haber salido de la tesis y que en ese caso debe de ser la parte de ella más entretenida de leer. El libro también estará unos años más actualizado.


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Después de los resúmenes de la tesis se encuentran los enlaces para irse descargando trozos.